Al final todos se van. La realidad, devuelve soledad.
Ellos y ellas vienen,
me aman, me quieren, me estiman y yo a ellos
y a ellas también. Disfruto del camino,
de su compañía, del Amor,
del Cariño, de la estima, de tu presencia
y un día, de repente,
sin saber porqué desaparecen.
Y a algunos les echo de menos,
a cada uno y a cada una por individual
o en conjunto, (el valor de pertenecer a un grupo)
y echar de menos es una putada
porque representa la transición
que termina siendo un desamor
y comprendo, que sigo amando a los que amé,
sólo que ya no están
y comprendo que Soy Amor,
que soy Infinito, Amor Infinito
y que el concepto «Siempre»,
es eso que sucede cuando yo te Amo,
pero no viceversa y siento algo así
como el duelo de un abandono,
bueno no, de uno no, de todos.
En realidad son todos el mismo.
Saben igual y dejan las mismas dudas,
la misma sensación de vacío, la misma ausencia,
las mismas preguntas sin respuestas.
Vértigo y desequilibrio, mal estar, desasosiego
y a pesar de ello,
cada día empiezo de nuevo
y tal vez, a lo mejor un día,
tu inercia positiva (haga como la mía);
un Siempre a mi favor
y no sólo al tuyo.
No se, quiero pensar que esos guiños, los roces, los amigos, las amigas, los abrazos que creemos que nos faltan, en realidad están jugueteando en otros lados mientras quienes nos los van a dar, aún no están todo lo cerca o lo necesario y esas miradas transparentes…no se, yo creo que están en todas partes. Por aquí, en New York, en el centro del mundo, al menos del mío por este tiempo, no ha habido día en el que alguien no me haya dedicado unas palabras por las calles… unas sonrisas de esas que alimentan el alma y luego, tras la charla de lo que parece cotidiano, aunque a mí, se me parezca mucho al Amor de cuidarnos los unos a los otros, todos terminan la conversación con las mismas palabras. Hasta ahora todos han sido hombres y de todas las edades, unos me lo han dicho en inglés y otros en español; Take Care. Te me cuidas.
Y resulta, que me parece lo mas parecido a un amuleto de protección que me puedan dar. Como una bendición que me regalan.
Y me paso el día dando las gracias, en Off y en On… porque resulta que si, que a veces, es difícil sentir esa distancia casi inhumana entre nosotros.
Por si acaso…no cierres esa puerta. No apagues tu sonrisa. No conviertas en la calle, la expresión de tu cara, en la misma que a veces ves en los otros y que no te gusta. Es probable que al otro lado, haya alguien esperando la misma expresión en tu cara, que esperas tu ahora en los demás.
“Se tu el cambio que quieres ver en el mundo“ y en los demás, yo haré lo propio con mi parte.